lunes, 24 de junio de 2013

Por el fin del aborto



Mañana, como todos los días 25, nos juntaremos a las 9 de la noche frente a la empresa abortista Ginemur, situada en la Avenida Juan de Borbón, nº 22, Murcia, para rezar el Santo Rosario. Pediremos a la Virgen el fin de TODA LEGISLACIÓN ABORTISTA y también que concluya la FINANCIACIÓN PÚBLICA que la Comunidad Autónoma de Murcia hace de los abortos. Con nuestro dinero no queremos que se maten a seres humanos.

Os esperamos.

VITA ET VERITAS

jueves, 20 de junio de 2013


 
Cuando se pretende tomarnos el pelo con el aborto a los católicos
 
 

En la presente entrada reproducimos por su interés el artículo del sacerdote Pedro Trevijano Etcheverria, publicado el pasado mes de mayo por el diario digital infocatólica (http://infocatolica.com/?t=opinion&cod=17307)
“El portavoz adjunto del Grupo Popular en el Congreso Rafael Hernando considera, en entrevista concedida a Europa Press, que no tendría sentido que la reforma de ley del aborto que planea el Gobierno hiciera retroceder la legislación española a los tiempos anteriores a 1983. Entonces se aprobó la ley de supuestos que, a su juicio, «funcionó razonablemente bien» y que es a la que se debería volver ahora, derogando la ley de plazos aprobada durante el gobierno del PSOE”
Cuando uno lee unas declaraciones así, uno no puede por menos de preguntarse si unos cuantos políticos no piensan que el pueblo español en general y los católicos en particular somos bobos. Cuando el número de abortos en España con la anterior Ley fue de 63756 en el 2000, 69.857 en el 2001, 77.104 el 2002, 79870 el 2003, pretender que esa Ley funcionó razonablemente bien es reírse de los ciudadanos a menos que el objetivo sea fomentar el aborto, o si quieren Vds. la interrupción voluntaria del embarazo que es lo mismo, pero suena menos duro.
La Iglesia Católica condena la Ley actual del 2010, pero también la anterior de 1983. El derecho a la vida es el derecho humano fundamental, hasta el punto que todos los derechos humanos se apoyan en él. El ser humano en cuanto ser humano está bajo la protección de Dios, no a merced de nuestro arbitrio, y si olvidamos esto, estamos olvidando el verdadero fundamento de los derechos humanos. No atentar contra la vida humana no nacida sino defenderla y protegerla es no sólo un precepto cristiano, sino un mandato humano universal.
La ley española de 1983 sobre el aborto, permitía éste por motivos de salud (aborto terapéutico), de violación y de malformación (aborto eugenésico), y merece desde el punto de vista cristiano muy severas críticas. Las leyes no son justas por el hecho de haber sido aprobadas democráticamente, sino por su adecuación a la dignidad humana. Las leyes que toleran y regulan la violación del derecho a la vida son gravemente injustas y no deben ser obedecidas, pues no es justo permitir que unos padres maten a su hijo. Además la experiencia prueba que los límites legales sirven de poco, pues el aborto se realiza de hecho sin restricciones de ningún tipo, incluso en muchos casos que no están despenalizados. Nuestra Conferencia episcopal ha denunciado en repetidas ocasiones esta legislación y despenalización como «gravemente injusta y que debe ser abolida» por ejemplo el 28-VI-85, el 25-III-91 , el 17-II-00 y el 27-IV-2001.

La despenalización del aborto en los pocos casos en que realmente corre peligro la vida de la madre estaba ya asumida judicialmente con la eximente de extrema necesidad. El aborto indirecto, permitido por la Iglesia, supone poner una acción en la que se busca un efecto bueno muy importante, por ejemplo curar un cáncer de matriz, pero la operación produce, sin buscarlo ni desearlo, la muerte del feto. La experiencia indica que los mal llamados abortos terapéuticos se hacen en su gran mayoría invocando razones de salud mental de la madre, defendiendo las clínicas abortivas que el hecho que una mujer quiera abortar ya supone un peligro para su salud psíquica si no aborta, con lo que la ley es un coladero, que permite que el aborto sea prácticamente libre, sin ni siquiera límite de tiempo. Además el aborto no cura ninguna enfermedad física ni psíquica, sino por el contrario, las agrava. Incluso hay hoy más ocasiones de peligro de muerte como consecuencia de un aborto provocado que como consecuencia de un embarazo, sin olvidar que la medicina se desprestigia y descalifica a sí misma cuando lo que pretende no es respetar ni defender la vida.
El caso de violación es el más delicado. El abortar no va a quitar ningún dolor físico o psicológico producido por la violación, sino que al contrario le va a agregar las complicaciones físicas o psíquicas que ya el aborto tiene por sí. Dar la muerte a un ser humano porque su padre ha cometido un delito, es una injusticia clamorosa. Recordemos que el embarazo por violación es excepcional (se calcula en alrededor de uno por mil) y que en un centro sanitario pueden emplearse métodos, como el uso de espermicidas, que dificulten la fecundación si se realizan poco después de la violación. Pero si el embarazo se produjera, las consecuencias de una agresión injusta no pueden legitimar otra injusticia, de la que esta vez sí sería responsable la madre, como sería la supresión de una vida inocente, de alguien que es hijo suyo. Por ello las madres que aceptan y educan a estos hijos o los dan en adopción realizan una acción admirable que Dios no puede dejar sin recompensa.
En cuanto al aborto eugenésico la presencia de anomalías o malformaciones no priva de dignidad humana a los que la sufren, siendo preocupante la mentalidad que considera que las personas portadoras de estas anomalías deben ser suprimidas antes de su nacimiento. El feto con algún defecto sigue siendo persona humana, como lo es una persona ciega, sordomuda o paralítica y no es progreso social eliminar a los disminuidos, sino que lo es el mejorar el modo de acogerlos y cuidarlos. Y no olvidemos que cuando estos minusválidos pueden expresar su opinión, están encantados de haber nacido y no suelen ser precisamente partidarios de que les hubiesen abortado.

En resumen: estamos ante una ley antidemocrática porque viola los derechos humanos al permitir la muerte violenta de seres humanos inocentes y a la hora de opinar sobre ella, no hay que olvidar este no pequeño detalle. Para la Iglesia el derecho a la vida es una exigencia del bien común que el Estado tiene obligación de proteger activa y eficazmente. La ley despenalizadora del aborto es una ley inhumana y anticristiana porque atenta contra el derecho a la vida de los seres humanos más débiles y necesitados de protección.
«La Iglesia está llamada a manifestar nuevamente a todos, con un convencimiento más claro y firme, su voluntad de promover con todo medio y defender contra toda insidia, la vida humana, en cualquier condición o fase de desarrollo en que se encuentre.
Por esto la Iglesia condena, como ofensa grave a la dignidad humana y a la justicia, todas aquellas actividades de los gobiernos o de otras autoridades públicas, que tratan de limitar de cualquier modo la libertad de los esposos en la decisión sobre los hijos. Por consiguiente, hay que condenar totalmente y rechazar con energía cualquier violencia ejercida por tales autoridades en favor del anticoncepcionismo e incluso de la esterilización y del aborto procurado. Al mismo tiempo, hay que rechazar como gravemente injusto el hecho que, en las relaciones internacionales, la ayuda económica concedida para la promoción de los pueblos esté condicionada a programas de anticoncepcionismo, esterilización y aborto procurado»( Exhortación de Juan Pablo II Familiaris Consortio, nº 30).
Y como se ha afirmado que la Iglesia sólo protestaba contra el aborto con gobiernos del PSOE, pero no del PP, he aquí la lista de las intervenciones de la Conferencia Episcopal Española o sus organismos, sobre el aborto durante el gobierno de Aznar: Comisión Permanente «El aborto con píldora también es un crimen»(18-VI-98), Comité Ejecutivo «Licencia aún más amplia para matar a los hijos. Declaración»(13-IX-98), Comisión Permanente «Con la píldora también se mata. Nota»(21-X-98), Comisión Permanente «Nota con motivo de la autorización de la píldora RU 486»(17-II-00), Subcomisión Episcopal para la Familia y la Defensa de la Vida «Sobre la píldora del día siguiente. Nota»(12-XII-00), Asamblea Plenaria «La ‘píldora del día siguiente’, nueva amenaza contra la vida. Exhortación»(27-IV-01).

jueves, 13 de junio de 2013



Mantener el derecho al aborto es sostener la corrupción del Estado

 




Reproducimos a continuación el comunicado publicado el día 7 de junio por el Obispo de Alcalá de Henares, D. Juan Antonio Reig Plá, en la página web del Obispado

Parece mentira que cueste tanto derogar la ley actual del aborto que consagra como bien jurídico el “derecho” a destruir una vida inocente en el seno de la madre. Ante el retraso, en la anunciada derogación de esta ley, y la supuesta incertidumbre del partido que sustenta al gobierno de la nación, se ha desatado otra vez toda la maquinaria de propaganda pro-abortista, utilizando, como siempre, casos límite para manipular los sentimientos de las personas y generar confusión.

Analicemos brevemente el engaño de los eslóganes a favor del aborto y, en general, la manipulación del lenguaje que se utiliza. Cuando hablamos del aborto, ¿se trata de una ‘interrupción’ del embarazo? No. El aborto procurado es la eliminación de un ser humano inocente. ¿Se trata de una cuestión de salud reproductiva o sexual? En absoluto. El aborto no cura nada, sólo destruye. ¿Se trata de afirmar el derecho de la madre a decidir? Tampoco. La madre tiene derecho a decidir aquellas cosas – entendemos que buenas – que afectan a su vida personal, pero no tiene derecho a matar a nadie por el hecho de llevarlo en su seno. Pero ¿y si el feto es un agresor – como algunos aseguran con falsedad – contra la salud de la madre? El hijo concebido y no nacido es siempre inocente. Nunca es un agresor y merece acogida y respeto, y más dada su precariedad e indefensión. Nada debe hacerse – ni como fin ni como medio – que atente directamente contra él. Ahora bien, siempre que se cumplan los pertinentes criterios, se podrá intervenir con los tratamientos legítimos que correspondan, para curar a la madre, aunque se produzca – indirectamente y sin pretenderlo –, la muerte del hijo. [Cuando hablamos de ‘los pertinentes criterios’ para intentar la curación de la madre nos referimos a los siguientes: que la acción en sí misma – prescindiendo de sus efectos – sea buena o al menos indiferente; que el fin del agente sea obtener el efecto bueno y se limite a permitir el malo; que el efecto primero e inmediato que se sigue sea el bueno; y que exista una causa proporcionalmente grave para actuar]. En todo caso, nada impide que la madre renuncie a tratamientos legítimos por salvar la vida de su hijo.

Hechas estas aclaraciones vayamos al núcleo de la cuestión. Cuando hablamos de la vida humana concebida ¿hablamos de un ser humano? Por supuesto. Afirmar lo contrario supone prescindir de las evidencias científicas. Entonces ¿cuál es la razón para continuar afirmando el derecho al aborto? A mí modo de ver dos son, al menos, las razones. En primer lugar se trata de prolongar la misma ceguera espiritual que llevó a mantener la esclavitud como buena durante siglos. En segundo lugar se trata de afirmar un concepto de libertad perverso, despótico e insolidario. Mantener el derecho al aborto es sostener la corrupción del Estado. Si se puede matar al inocente indefenso, toda corrupción imaginable es posible y podría ser garantizada como «derecho».

La mujer no debe caer en este engaño. Ella también es víctima del aborto y merece el apoyo y la estima de toda la sociedad. La verdadera ayuda a la madre es sostenerla en su embarazo y ayudarla en la crianza de los hijos. Así pasaríamos de la cultura de la muerte a poner las bases para la civilización del amor.

+ Juan Antonio Reig Pla

Obispo de Alcalá de Henares

 

martes, 11 de junio de 2013

MAÑANA,  12 DE JUNIO, ROSARIO POR ESPAÑA
Mañana, como viene siendo habitual en los últimos meses, se rezará un Rosario público por España en diversas capitales y varios municipios más de nuestro país. La asociación Vita et Veritas se suma a esta iniciativa y participará en el acto.

A continuación facilitamos información proporcionada por la plataforma "Rosario por España":


La plataforma “Rosario por España” con el apoyo de varias organizaciones más, convoca a los fieles católicos a sumarse a los rezos con el fin de paliar mediante la oración, la grave situación general que vive nuestra sociedad. Como cada día 12 de mes, se pedirá por la conversión de España, por la paz y la unidad nacional, por el fin de las inicuas leyes que atentan contra la vida y la familia, por las necesidades de sustento y vivienda de tantos españoles que sufren la crisis económica, y por la Santidad del Clero español.

La plataforma “Rosario por España”, anima a todos los fieles católicos a unirse a las convocatorias del Rosario en sus respectivas ciudades, recordando también, que en este año de la Fe hay indulgencia plenaria para quién dé testimonio público de la misma. Allí donde aun no exista convocatoria, animamos a todos los católicos a unirse a la misma hora en oración junto al resto de España.

La plataforma quiere agradecer a todos los responsables de organización y a todos los asistentes, el éxito creciente de la iniciativa y la rápida expansión de la misma.

¿DONDE SE REALIZA EL ROSARIO POR ESPAÑA?

ALBACETE: El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. Plaza de la Virgen de los LLanos.

ALICANTE: El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. Plaza de la Santa Faz (Detrás del Ayuntamiento).

ALMERÍA: El día 12 de cada mes, a las 18:00 horas. Plaza de San Sebastián (Junto a la Inmaculada).

BARCELONA: El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. Calle Aragón 299, (frente a la Parroquia de la Purísima Concepción).

CASTELLÓN: El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. Plaza Mayor. (Entre la Concatedral de Santa María y el Fadrí).

HUELVA: El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. Calle Puerto (Frente a la Inmaculada).

CARTAYA (HUELVA): El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. En la puerta de la Iglesia del Apostol San Pedro.

PALOS DE LA FRONTERA (HUELVA): El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. Puerta principal de la Iglesia de San Jorge Martir.

LA CORUÑA: El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. Cuesta de San Agustin (Junto a la Iglesia de San Jorge).

LOGROÑO: El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. Confluencia de C/Vara de Rey con Av Gran Via. (Junto al antiguo Banco de España).

MADRID: El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. Plaza de Colón (Junto a la bandera).

MÁLAGA: El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. Plaza del Obispo (Junto a la Catedral).

MURCIA: El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. Plaza de la Cruz (Junto a la Catedral).

SEVILLA: El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. Plaza del Triunfo (Junto a la Catedral).

VALENCIA: El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. Plaza de la Almoina (Lateral de la Basílica de la Virgen).

VALLADOLID: El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. Plaza de la Santa Cruz (Frente al colegio San José).

ZARAGOZA: El día 12 de cada mes, a las 20:00 horas. Plaza del Pilar (Junto a la Virgen).


miércoles, 5 de junio de 2013


Las similitudes entre el aborto y la esclavitud
 

 
 
Exponemos en la siguiente entrada -tal y como ha indicado la asociación BlackGenocide.org-  las 5 argumentaciones que usan tanto esclavistas como abortistas:

1. Los opresores niegan a la víctima la categoría de "persona", incluso desde sus más altos tribunales.

Así, en 1857 el Tribunal Supremo de EEUU (un país democrático, con elecciones y equilibrio de poderes y una Constitución) estableció que los negros eran "una clase de seres inferior y subordinada". Y en la vida cotidiana eran mencionados como "mercancía", "producto", "unidades", "machos y hembras", y a los niños "crías", etc... 

De igual forma, en 1973 el Tribunal Supremo de EEUU declaró que "la palabra ´persona´ no incluye al no nacido, tal como la usa la Constitución"

El lenguaje abortista, al igual que hacía el esclavista, deshumaniza al ser humano en su fase prenatal y le llama "producto de la concepción", "nasciturus", etc... La Ministra Bibiana Aído en España se hizo famosa diciendo que el embrión humano era un ser vivo que no era humano.


2. Los opresores, en vez de hablar del oprimido, hablan del "derecho a elegir".

En los debates en el Senado de EEUU en 1858, el senador Stephen Douglas insistía en que él personalmente estaba en contra de tener esclavos, pero que cada Estado de EEUU tenía el derecho a elegir si quería ser un estado esclavista o no. 

También era común que los empresarios esclavistas dijesen: "si no quieres tener esclavos, no los tengas, nadie te obliga, pero no limites mi derecho a elegir tenerlos".

Lo mismo sucede hoy. Los pro-aborto dicen que "abortar es un derecho", que "no es obligatorio" y que es el "derecho a elegir" (la mujer "elige" abortar; el médico "elige" practicar el aborto). 

Dejando a un lado que hay sanitarios, médicos y mujeres forzadas y presionadas para hacer abortos (y hay mil formas de presionar), es evidente que al humano no nacido se le ha obligado a ser víctima, a morir. Además, se obliga a los padres y maridos, y a los abuelos y abuelas, y a las personas que querrían adoptar o proteger al niño a asistir impotentes a la eliminación de su hijo, nieto o simple congénere humano. 

El "si no quieres no lo hagas, pero déjame hacerlo a mí" lo han usado los esclavistas, los abortistas y muchos otros que querían justificar sus crueldades. 

3. Los opresores usan argumentos económicos: la opresión es necesaria por sus beneficios .

Los esclavistas insistían en que el bien económico necesitaba la mano de obra esclava... la sana y fuerte, se entiende.

Los abortistas insisten en que el bien económico de la mujer (y a veces también el "bienestar físico, psíquico y social") requiere del aborto. A veces incluso presentan estadísticas (por lo general muy erróneas) sobre lo bueno que es el aborto para "ahorrar costes" a la sociedad, eliminando niños "que no serán queridos y causarán costes sociales" o, directamente, eliminando hijos enfermos. Como en la esclavitud, se valora la producción de "sanos y fuertes". El humano es visto como mero objeto productivo... o un impedimento eliminable. 

4. Los opresores hablan del oprimido como de una enfermedad, amenaza sanitaria, plaga que hay que controlar

Es otra forma de deshumanizar. Los esclavistas podían recurrir a este argumento, e incluso Benjamin Rush, un científico de la época que personalmente se oponía a la esclavitud, consideraba que los negros eran enfermos, algún tipo de blancos deformados en necesidad de una cura. Pero otras veces bastaba con considerarlos "parásitos".

De igual forma, los abortistas hablan del feto y el embrión humano como un "parásito" dentro de la mujer (por ejemplo, Warren Hern, en su libro de texto que enseña a realizar abortos "Abortion Practice"). Y hablan del aborto como de una práctica "médica", cuando lo cierto es que el aborto no cura nada y muy a menudo empeora la salud (física, mental) de la mujer.

5. Los opresores declaran que la opresión es lo más humano y compasivo que se puede hacer con los oprimidos

Así, los esclavistas decían que los negros no se podían cuidar ni alimentar solos, que se dañarían, morirían, que siendo esclavos viven mejor.

De igual forma, los abortistas dicen que es mejor matar al niño antes de que nazca a que viva en un mundo donde hay enfermedades, pobreza, sufrimiento... Presentan su opresión sobre el indefenso como "un favor" (por supuesto, ni solicitado ni razonable.. ¿o matamos a los niños de 5 años, o a los adultos, simplemente porque en el mundo hay dolor y sufrimiento?).

Fuente: http://www.religionenlibertad.com/articulo.asp?idarticulo=29441